En una nueva jornada de trabajo interno, el Grupo de Puebla, en su VI taller, debatió sobre los Derechos Sexuales y Reproductivos, espacio que fue moderado por la diputada chilena, Karol Cariola, y contó con las exposiciones de Elizabeth Gómez Alcorta, ministra de la Mujer, Género y Diversidades de la Nación Argentina; y Eleonora Menicucci, exministra de la Secretaría Especial de Políticas para las Mujeres del gobierno de la presidenta Dilma Rousseff.
En la sesión, que se suma al apretado calendario de actividades del grupo, participaron la senadora uruguaya, Mónica Xavier; la senadora paraguaya, Esperanza Martínez; el senador mexicano, Carlos Sotelo; Aida García-Naranjo, excanciller peruana: el senador colombiano, Iván Cepeda; la diputada chilena, Natalia Castillo; Adoración Guzmán, jurista del Consejo Latinoamericano de Justicia y Democracia; y Marco Enríquez-Ominami, fundador del grupo; entre otras y otros.
Luego de la inauguración del taller, a cargo de Marco Enríquez-Ominami, fundador del grupo, la primera expositora, la jurista y ministra argentina, Elizabeth Gómez Alcorta, explicó que “en el 2005 se crea el pañuelo verde que termina siendo un símbolo político, y que tardó mucho tiempo en hacerse masivo. Hoy estamos en proceso de implementación, tenemos algunos obstáculos que sabíamos que íbamos a tener. Para nosotros comenzó otro punto de partida, y es que ninguna mujer en latinoamérica, no pueda acceder a su derecho”.
“En cuanto a los desafíos, primero es construir feminismo popular, feminismo con las compañeras de los barrios, con las compañeras indígenas, ese feminismo muta, es flexible, no viene con una receta de cuidado en términos de la mujer de la ciudad. Feminismo popular. Lo segundo es la política pública, cuando éstas generan servicios de cuidados, de posibilidad dle derecho al aborto, posibilidad del acceso a la anticoncepción (…) congeniar estas dos dimensiones, es el gran desafío para las y los progresistas”, sentenció una de las propulsoras de los históricos proyectos de aborto en Argentina.
Luego, la segunda expositora, la socióloga Eleonora Menicucci, comentó que “cuando les preguntaba a las mujeres de cualquier estado brasileño si ya se habían realizado algún aborto, respondían que sí, pero al preguntarles si eran favorables a la legalización de la práctica, respondían de manera negativa. La razón de esta dualidad es el peso de las religiones en sus vidas cotidianas y del patriarcado. Solamente con nosotras mujeres sensibilizando en las calles a toda la sociedad, conseguiremos revertir el cuadro actual, ese panorama tan cruel para las mujeres”.
Por su parte, la senadora de Uruguay, Mónica Xavier, fue enfática en decir que “el cuerpo de la mujer es un campo de batalla donde pueden opinar abogados, médicos, cualquiera puede opinar, menos nosotras mismas. Por tanto empoderar a las mujeres para que hagan valer la autonomía sobre sus propios cuerpos, es algo muy importante”.
“Hoy dia el aborto ya no es un tema clandestino, es un tema de política públicas, de la agenda política y del debate electoral. No porque solo sea un tema vanguardista de las mujeres, sino porque se mueren millones de mujeres por eso. No estamos ante un tema del espíritu liberal, o vanguardista en términos académicos, estamos en la defensa de la vida, en el problema donde se pierden la vida de muchas mujeres. Somos defensoras de la vida”, explicó, casi al final de la jornada, la encargada de la relatoría, Aída García-Naranjo, excanciller del Perú.
Finalmente, Marco Enríquez-Ominami, fundador del grupo y excandidato presidencial chileno, reflexionó que “ser progresista no es solamente defender la justicia social, es atender las creencias y las ciencias en este debate sobre los derechos sexuales y reproductivos, que son sustantivos y trascendentales. A mi juicio, ser progresista es participar en ambas dimensiones”.